BREVE DICCIONARIO DE LA LITERATURA PARAGUAYA
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M
MAIDANA, Juan (Caraguatay, 1917-Asunción, 1982). Poeta,
narrador y autor teatral en guaraní. Autor de Mitá rerahahá,
primera novela corta en verso escrita en guaraní y publicada en
Cuaderno de Literatura Popular, No. 1, 1980, comenzó a escribir
poesía cuando sólo tenía trece años. Desde
1976 hasta su muerte, Maidana figuraba significativamente en el Programa
de Cultura y Arte de Misión de Amistad. Las revistas Isyry, Okára
poty cue mí, y otras, publicaron sus poesías. Y han puesto
música a varias de ellas Emilio Bobadilla Cáceres, Pedro
Barboza y Agustín Barboza, siendo grabadas en disco por "Los
cancioneros del alba", "Dúo Aguilera-Brítez",
"Los caballeros del campo" y "Agustín Barboza-Ybera".
Otras obras suyas incluyen tres piezas teatrales y un poemario: Chapetonía
ymá guaré, Póra, Karaí pyharé y
"Mba'éichapa rupí, todas de1976. Las obras de teatro
fueron dramatizadas y llevadas a escena por el Teatro Estudio Libre en
1981. "Mba'éichapa rupí" se publicó póstumamente
en Cuaderno de Literatura Popular, No. 3, en 1986.
MARCOS, Juan Manuel (Asunción, 1950). Poeta, narrador,
crítico literario, ensayista y docente universitario. Doctorado
en Filosofía por la Universidad de Madrid, y en Letras por la de
Pittsburgh, catedrático en universidades nacionales y extranjeras
(incluyendo cuatro en Estados Unidos), Juan Manuel Marcos es actualmente
Rector de la Universidad del Norte (Asunción) y miembro titular
del Consejo de Universidades del Paraguay. También ha participado
de manera muy activa en la política de su país, especialmente
después de la caída de la dictadura de Stroessner en 1989.
Prolífico escritor y crítico, hasta la fecha ha publicado
dieciséis libros y más de cincuenta artículos en revistas
especializadas europeas, estadounidenses y latinoamericanas. Fundador de
la revista internacional Discurso literario (1983) y miembro del
consejo editorial de numerosas publicaciones académicas, ha recibido
premios literarios y distinciones diversas de una decena de instituciones
americanas y europeas. Su producción literaria incluye, entre otros,
los siguientes títulos: Poemas (1970; Premio René
Dávalos), López (montaje teatral, Asunción,
1973), Roa Bastos, precursor del postboom (1983; Premio Internacional
PLURAL [México] de ensayo), De García Márquez al
postboom (1986), El invierno de Gunter (1987; Premio Libro del
Año), su primera novela, Poemas y canciones (1987) y Así
como por la honra, Selección de textos sobre la libertad (1990).
MARRERO MARENGO, Ricardo (Asunción, 1879 - Buenos Aires,
1919). Poeta y periodista. Descendiente de familias argentinas avecindadas
en el Paraguay, se reintegró al país con posterioridad a
la revolución de 1904, pasando a colaborar de manera activa en el
periodismo, especialmente en el diario "Los Sucesos", del que
fue redactor. Un primer soneto, dedicado a Salvador Rueda, fue dado a conocer
por la Revista del Instituto Paraguayo, en su edición de
ese año. Integró en 1907 el grupo literario La Colmena,
que reunía a posrománticos y modernistas bajo la égida
de un romántico declarado: don Juansilvano Godoi. José Rodríguez-Alcalá
lo calificaba --allá por 1910-- de "bella promesa", incluyendo
en su recuento nueve poemas, en su totalidad sonetos, en los cuales la
influencia del modernismo resulta evidente. Con posterioridad al golpe
cuartelero del 2 de julio de 1908 se alejó del país. Puede
afirmarse que en la década inicial de este siglo fue uno de los
orfebres del soneto, hallando parangón sólo en Fariña
Núñez. [Ficha preparada por el Profesor Amaral]
MARTI, Reinaldo (Asunción, 1908). Narrador, periodista
y autor teatral. De largo derrotero en el quehacer literario, Reinaldo
Martí --seudónimo de Reinaldo Martínez-- se
inició periodística y literariamente en la Revista Minerva
de los estudiantes del Colegio Nacional que aglutinó a los miembros
de la conocida como "generación del 28". Sus novelas y
cuentos, de agudo acento social y ricos cuadros de la vida campesina, reflejan
un claro --aunque en ocasiones sutil-- afán de protesta. Su producción
narrativa incluye una colección de cuentos, Estampas del terruño,
y tres novelas: Juan Bareiro (1957), Pioneros del oeste (1978)
y La noche blanca (1986). También es autor de El señor
gerente, una comedia inédita.
MARTINEZ, Luis María (Asunción, 1933). Poeta, cuentista
y ensayista. Presidente de la Sociedad de Escritores del Paraguay (SEP)
de 1990 a 1991 y director de la Revista "Estudios" entre 1986
y 1990, actualmente se dedica a reunir su copiosa producción inédita
para su próxima publicación en libro(s). De extenso recorrido
poético, su obra se caracteriza por un fuerte acento crítico-denunciatorio
y muchos de sus poemas reflejan gran admiración por Elvio Romero,
el poeta paraguayo más conocido de las últimas décadas.
Varias veces galardonado con premios literarios, Luis María Martínez
ha publicado más de una docena de libros, de los que se destacan
en particular los poemarios Armadura fluvial (1961), Ráfagas
de la tierra (1962), Desde abajo es el viento (1970), Clarea
el firmamento (1975), Perpétuamente alondra (1982; Primer
Premio del Concurso de Poesía 1980 del PEN Club del Paraguay), Ya
no demora el fuego [1969-70] (1986) y una muy valiosa recopilación
antológica, en dos tomos, de la poesía social paraguaya:
El trino soterrado, vols. I (1985) y II (1986).
MARTINEZ, Reinaldo. Ver Martí, Reinaldo.
MARTINEZ GAMBA, Carlos (Villarrica, 1942). Poeta en guaraní.
Aunque reside desde hace años en la Argentina (Puerto Rico, provincia
de Misiones) y a pesar de que tiene una vasta producción poética,
sólo usó el guaraní --"el francés de América",
como lo llamaban los jesuitas-- para comunicar su poesía. De sus
innumerables composiciones poéticas, el Dr. Ramiro Domínguez
rescata Pychãichí (1970), producto de la picaresca
criolla y popular, como una pequeña obra maestra. Dice él
respecto al binomio "autor-obra": "Nada de extraño
si al fin este vagabundo del alba nos entrega una cosecha tan madura como
este PYCHAICHI, limpia talla de santero indígena en la madera
dura y menospreciada del guaraní de nuestros mayores" (en R.
Alarcón Martínez, El Parnaso Guaireño, 1987,
pág. 388). Además de la obra ya citada, Carlos Martínez
Gamba ha publicado los siguientes títulos: Plata yviguy (1971),
Amombe'úta avá ñe'éme (cuentos; 1972),
Tapekué ka'á (1975), Niño arapeguá
purahéi (1978) y otros. También tradujo al guaraní
un poemario de Rodrigo Díaz-Pérez, con el título de
Yvoty aty poravo pyre (1973).
MAXIMILIANO ROLANDO. Ver RUFFINELLI, Francisco.
MAZO, Ricardo (Pilar, 1927 - Asunción, 1987). Poeta. Ingeniero
geólogo de profesión, Mazó ha escrito poesía
de alto contenido lírico. Perteneciente a la llamada "promoción
del 50", destacado miembro de la Academia Universitaria del Paraguay
(liderada por el escritor y sacerdote español César Alonso
de las Heras), tiene obras publicadas en Poesía (1953), poemario
colectivo que incluye también textos de José-Luis Appleyard,
Ramiro Domínguez y José María Gómez Sanjurjo.
En cuanto a obras publicadas, Briznas. Suerte de antologia (1982)
es su única compilación antológica (editada por Alcándara).
MEBA. Ver ARGÜELLO, Manuel E. B.
MELGAREJO, Críspulo (Asunción, 1938). Poeta, dramaturgo
y actor de teatro y cine. A los dieciséis años se inicia
en el campo artístico como estudiante de la Escuela de Arte Escénico
bajo la dirección de Don Roque Centurión Miranda, conocido
maestro del teatro nacional. A partir de 1972 ocupa diversos cargos relacionados
con el mundo del arte: entre otros, la presidencia de ANAI (Asociación
Nacional de Actores Independientes) de 1972 a 1976, la vicepresidencia
de APA (Autores Paraguayos Asociados) de 1976 a 1978 y, seguidamente, la
presidencia de la misma asociación (APA) entre 1978 y 1992. Como
actor, participa en un gran número de obras teatrales de autoría
nacional y también en un par de películas argentinas. Su
producción poética incluye varias poesías, casi todas
musicalizadas, entre las que se cuentan "Serenata del Corazón"
(1955), "Adiós otra vez", "Amor de ayer", "Hoy
es tarde" y "Nda yujhú mo'aigui ne cunuú mi",
para mencionar sólo la mitad de las que tiene grabadas hasta la
fecha. Como dramaturgo, es autor de varias obras y co-autor de muchas más.
Su producción teatral incluye nueve piezas representadas. De su
sola autoría son Oúma la dólar (1977), Los
compadres Nueva Yorgui (1978) y Los Compadres Detectives (1978);
y en co-autoría le pertenecen tres comedias musicales con Neneco
Norton --El gringo de la Loma (1968), Escuela Pyjharé
(1972) y Serenata Paraguaya, esta última escrita para la
televisión-- y otras tres con Mario Halley Mora: Eyú Lune...
(1976), Oca úva aparte (1976) y Divorcio a lo Paraguay
(1977).
MENDEZ FLEITAS, Epifanio (San Pedro del Paraná, 1917 -
Buenos Aires, 1985). Ensayista, compositor, poeta y periodista. Conocido
escritor y luchador político de oposición a la dictadura
del general Alfredo Stroessner imperante en su país (1955-1989),
Méndez Fleitas se vio obligado a vivir la última mitad de
su vida en el exilio donde falleció en 1985. De su extensa bibliografía
se destacan especialmente dos libros poéticos: Sueños
de adolescente (1936) y Bajo la verde arboleda (1940), y dos
obras fundamentales para la interpretación de la realidad paraguaya
actual: Diagnosis paraguaya (1965) y Lo histórico y lo
anti-histórico en el Paraguay (1976). También es autor
de numerosas composiciones del folklore nacional y ha musicalizado varios
poemas de escritores paraguayos, incluyendo versos de Carlos F. Abente,
Teodoro S. Mongelós y Augusto Roa Bastos.
MENDONÇA DE SPINZI, Lucy (Asunción, 1932). Escultora
ceramista, cuentista, dramaturga y ensayista. Aunque nació en Asunción,
vivió en el exilio con sus padres desde los ocho años. Volvió
al Paraguay para casarse y desde entonces reside en su país natal.
En lo literario, se ha dedicado tanto al teatro como al ensayo y a la narrativa.
Hasta la fecha ha sido galardonada con más de una decena de premios
importantes. En teatro, es autora de Los desarraigados, pieza que
recibió el Primer Premio de Obras Teatrales de Radio Cáritas
en 1965. Ha escrito también un ensayo sobre Rafael Barrett, ganador
del Premio Internacional de Ensayo de Radio Cáritas (1988), convocado
juntamente con el Instituto Paraguayo para la Integración de América
Latina. En 1987 publicó una antología de veintidós
cuentos bajo el título de Tierra Mansa y Otros Cuentos.
MEZA, Miguelángel (Caacupé, 1955). Poeta en guaraní. Miembro del
Taller de Poesía Manuel Ortíz Guerrero, Miguelángel
Meza es autor del poemario Ita ha'eñoso (Ya no está sola
la piedra, 1985). Viaje metafórico entre génesis y apocalipsis,
este libro incorpora a la vez antiguas fuentes míticas guaraníes
y un ansia urgente de modernidad. Meza también colaboró --junto
con Carlos Villagra Marsal y J. A. Rauskin-- en la versión del poemario
en castellano.
MODERNISMO. Con respecto al movimiento modernista paraguayo,
hasta hace unos años se solía ubicar sus inicios alrededor
de 1913. En efecto, algunos autores nacionales y extranjeros --éstos
siguiendo a aquéllos-- hasta hace más de diez años,
dieron en fijar con rara unanimidad como fecha inicial de la aparición
del modernismo en nuestro país la de los orígenes de la revista
"Crónica" (abril de 1913). Con esto quedaba establecido
el irremediable atraso de dicho movimiento en su llegada y auge posterior.
Sin embargo, investigaciones realizadas por el ensayista y crítico
Raúl Amaral durante más de dos décadas permitieron
descubrir que en verdad reconoce el cumplimiento de etapas producidas con
bastante antelación: una primera o "precursora" que va
del ensayo crítico de Gondra sobre la poética rubendariana
("En torno a Rubén Darío") expresada en Prosas
Profanas (v. "La democracia", Asunción, 14 al 25 de
enero de 1898) y los poemas publicados por Francisco L. Bareiro (1878-1930)
bajo el signo de Azul, entre 1896 y 1898, hasta la presencia del
escritor argentino Martín de Goycoechea Menéndez (1901),
aunque ya en 1903 Ricardo Brugada (hijo) había calificado de "modernista"
a López Decoud. Pero es a partir de 1905, año en que Darío
edita sus Cantos de vida y esperanza y Leopoldo Lugones sus Crepúsculos
del jardín, que se producen las mayores evidencias a través
de un posromántico convertido como Alejandro Guanes (1872-1925)
y de un innovador como Hérib Campos Cervera (padre) (1879-1922).
En dicha segunda remesa actúan: Roberto A. Velázquez (1886-1961),
Ricardo Marrero Marengo (1879-1919), Fortunato Toranzos Bardel (1883-1942)
y desde fuera: Eloy Fariña Núñez (1885-1929), debiendo
agregarse también a Gomes Freire Esteves (1886-1970). Dos ejemplos
bastan para confirmar el acerto: la traducción de Jean-Paul Casabianca
del "Nocturno" de José Asunción Silva al francés
(1901) y la versión de Ignacio A. Pane de la "Ode au Paraguay
de Casabianca (1903). El tercer sector abarca desde 1910 hasta 1916 y lo
componen los poetas Guillermo Molinas Rolón (1892-1945) y Pablo
Max Ynsfrán (1894-1972) y los prosistas --narradores-- Leopoldo
Centurión (1893-1922) y Roque Capece Faraone (1894-1924). Con posterioridad
surgirán: Natalicio González, Leopoldo Ramos Giménez
y Manuel Ortiz Guerrero. Cierra el ciclo el núcleo de la revista
"Juventud" (1923-1926), del que son representativos: José
Concepción Ortiz, Vicente Lamas, Heriberto Fernández y Pedro
Herrero Céspedes, entre otros. Las publicaciones representativas
fueron: "Revista del Centro Estudiantil" (1908-1927), "Crónica"
(1913-1915), "Letras" (1915-1916), "Guarania", 1a.
época (1920-1921) y la ya citada "Juventud". (Bibliografía:
Raúl Amaral, El modernismo poético en el Paraguay [1901-1916],
Asunción, Alcándara, 1982; y del mismo autor: "Inicios
modernistas", en "Hoy", Asunción, 25 de mayo de 1987.)
MOLINAS ROLON, Guillermo (San Miguel [Misiones], 1892 - Yhú
[Alto Paraná], 1945). Poeta. A los dieciocho años se dio
a conocer en las aulas del Colegio Nacional (1910) con su extenso poema
"Canto a la raza", publicado en la "Revista del Centro Estudiantil".
Perteneciente a la promoción de bachilleres de 1912 y co-fundador
un año después de la Revista "Crónica" --con
Pablo Max Ynsfrán, Leopoldo Centurión y Roque Capece Faraone--,
Molinas Rolón produjo una copiosa e importante obra poética
donde se patentiza la influencia de escritores modernistas rioplatenses,
y en particular la del argentino Leopoldo Lugones y la del uruguayo Julio
Herrera y Reissig. Cultivó, aunque no con mucha intensidad, el tema
lírico y en ocasiones, con auténtico sentimiento, el épico,
de indudable vigencia en las letras paraguayas desde el romanticismo. Su
producción poética incluye, además de "Canto
a la raza" ya mencionado, los siguientes poemas: "En la fiesta
de la raza" (1913), "Del jardín de las leyendas"
(1914) y "Surge et ambula" (1924), obra de indiscutible calidad
y escrita cuando ya había regresado al ámbito campesino de
donde provenía.
MONGELOS, Teodoro S. (Ypacaraí, 1914 - Foz de Yguazú,
1966). Poeta. Considerado uno de los mejores poetas en guaraní,
Teodoro S. Mongelós vivió en el exilio durante varios años,
primero en Uruguay y después en Brasil, donde falleció en
1966. Gran parte de su producción poética, de alto contenido
social, ha aparecido en revistas y publicaciones populares. A muchos de
sus poemas se les ha puesto música e integran ya las páginas
del cancionero paraguayo. Entre sus obras más conocidas están:
"Jha che retá Paraguay" ("Oh Paraguay, mi país"),
"Che ca'arú nda vy'ai" ("Mi atardecer desesperado")
y "Che mboé jharé-pe" ("A mi maestra"),
las dos últimas con música de Epifanio Méndez Fleitas.
MORALES, Joaquín (Asunción, 1955). Poeta. Seudónimo
de Virgilio Pessolani, Joaquín Morales ha publicado, hasta
la fecha, dos poemarios: Postales de Bizancio (1984) y Poliedro
(1985).
MORENO, Fulgencio R. (Valle de Tapuá, 1872 - Asunción,
1933). Poeta y periodista. Sus inicios fueron estrictamente literarios,
ejemplificados en el soneto "Al cerro Yariguaá", publicado
en 1888 en La Ilustración Paraguaya. Otros de sus poemas
de época fueron: "Notas" y "Neblinas". Luego
su tarea se volvó intensamente al periodismo. Puede rescatarse de
él una aproximación teórica a la literatura nacional
publicada en La Unión (1894). Juntamente con Victorino Abente
publicó sátiras en verso con el seudónimo conjunto
de "Morabén". Nunca abandonó del todo su vena literaria
como puede advertirse en los capítulos de su libro La ciudad
de la Asunción (1926). En sus escritos de comienzos de siglo
resulta patente la influencia de Larra. [Ficha preparada por el Profesor
Amaral]
MORENO DE GABAGLIO, Luisa (Chaco, 1949). Cuentista y poeta. Aunque
tiene el título de Doctora en Ciencias Veterinarias (1976), se ha
dedicado más a la creación literaria que a su profesión.
Socia fundadora de PRONATURA e integrante de varios Talleres Literarios,
Luisa Moreno de Gabaglio tiene cuentos publicados en libros colectivos
del "Taller Cuento Breve" (dirigido por Hugo Rodríguez-Alcalá),
en el diario "HOY" y en revistas literarias locales y extranjeras.
En 1992 publicó su primer libro, Ecos de monte y de arena,
una colección de cuentos ecológicos, cuya segunda edición
apareció dos años después en versión bilingüe
(español-guaraní), traducida al guaraní por Mario
Rubén Alvarez con el título de Kapi'yva (1994). Dos
relatos de dicha colección han sido distinguidos en concursos literarios
de cuentos breves: "Capibará" (2o. Premio en el Concurso
"Veuve Clicquot Ponsardin", 1988) y "Réquiem para
un dorado" (Mención de Honor en el Concurso de la Revista "Punto
de Encuentro" de Montevideo, Uruguay, 1990). En otro concurso organizado
por la misma revista en 1993, le concedieron el segundo premio por "El
hombre de los catalejos", relato que integra su segundo libro de cuentos
(en prensa). Actualmente tiene también en preparación su
primer poemario, uno de cuyos poemas ("Panthera Onca") obtuvo
el segundo premio en el concurso de cuentos y poemas ecológicos
organizado por el "Círculo Español de Puebla" (México)
en 1993.
MORINIGO, Victor (Asunción, 1898-1981). Ensayista, crítico,
periodista y político. Su condición de inédito refleja
la situación de la mayoría de los escritores paraguayos de
su época. Adolescente aún viajó al Uruguay para iniciar
sus estudios en la Escuela Naval, que no llegó a completar. Luego
se instaló en Buenos Aires donde dio comienzo a su tarea periodística
desde las revistas "Caras y Caretas" y "Mundo Argentino",
que recogieron, a partir de 1921, sus primeras colaboraciones. A su regreso
al Paraguay, cuatro años después, colaboró en el periodismo
político representado en los diarios "Patria" y "La
Unión", de tendencia republicana. Allí difundió
sus "Divagaciones marginales", su crítica de costumbres
denominada "De ideario del Pacífico Asunceno" y reanudó
la difusión de sus valiosos Apólogos guaraníes,
en los que se advierte el cultivo de la fábula, género por
entonces no muy difundido en nuestro ámbito literario. Colaboró
también, intensamente, en la segunda época de la revista
"Guarania" (1933-1937) y escribió numerosos prólogos
con evidente calidad estética (sin hacer por ello "esteticismo"),
entre los que se destaca un estudio crítico sobre la obra de Natalicio
González y en particular sobre su novela La raíz errante
(1953). Otros quehaceres, referidos a la función pública,
fueron aminorando la intensidad de su tarea creadora, pero en sus últimos
tiempos preveía la edición de sus Apólogos,
que dentro de la orientación folklórica deben ser estimados
como un aporte de excepción. A tantos años de la muerte de
su autor no han sido aún impresos en volumen. [Ficha bibliográfica
preparada por el Profesor Raúl Amaral]
MOSQUEIRA, Silvano (Carapeguá, 1875-1954). Ensayista.
Desempeñó funciones en el Archivo Nacional y en la cancillería,
habiendo actuado en Brasil, Argentina y los Estados Unidos. Sus propensiones
estuvieron dirigidas inicialmente al ensayo literario, evidenciado en Páginas
sueltas (1902), Semblanzas paraguayas (1908), Ideales (1913),
Siluetas femeninas (1930) y Nuevas semblanzas (1937). Una
prosa sencilla, casi lineal, acompaña a esos trabajos. Con el seudónimo
de "arymolatanso" fue traductor eminente del castellano al guaraní,
en particular de las "Rimas" de Bécquer. De su labor se
ocuparon la escritora uruguaya Juana de Ibarbourou y don Viriano Díaz-Pérez.
[Ficha preparada por el Profesor Raúl Amaral]
MUÑOZ, Gloria (Asunción, 1949). Dramaturga, cuentista
y docente. Miembro del "Centro de Investigación y Divulgación
Teatral", representante del Paraguay en la "Red Latinoamericana
de Productores Independientes de Arte Contemporáneo", Gloria
Muñoz editó y publicó Canto de poetas (1988),
selección de poesía universal destinada a niños, y
La prohibición de la Niña Francia, pieza teatral (inspirada
en el cuento "El romance de la Niña Francia" de Concepción
Leyes de Chaves) representada en 1994. Galardonada con una mención
especial por su obra Tragedia de la Cárcel Pública
en el concurso de obras teatrales organizado por el Teatro Municipal en
1992 y con el Primer Premio de cuentos "Néstor Romero Valdovinos"
por su cuento "La navaja de don Ruperto" en 1993, es además
autora de La Divina Comedia de Colón, obra de teatro estrenada
en 1992. Realizó también la adaptación teatral de
Yo el Supremo (conocida novela de Augusto Roa Bastos) y de Vidas
y Muerte de Chirito Aldama (pieza de Juan Bautista Rivarola Matto),
obras estrenadas en Asunción en 1991 y 1993, respectivamente.
N
NARRATIVA ACTUAL. La narrativa ha sido el género menos
prolífico de la literatura paraguaya y el más afectado por
el contexto histórico-político nacional. Hasta mediados de
siglo predomina el ensayo histórico y en la escasa producción
narrativa del período tienden a prevalecer, como en el ensayo, las
corrientes romántico-nacionalistas de exaltación del pasado
y de afirmación de los valores espirituales del pueblo paraguayo,
heroico sobreviviente de la catástrofe de la Guerra Grande (o Guerra
de la Triple Alianza: 1864-1870). Dentro de esa línea tradicionalista,
iniciada por el argentino Martín de Goycoechea Menéndez --glorificador
de la Guerra Grande y mitificador de la literatura nacional-- habría
que mencionar las obras histórico-costumbristas de Natalicio González,
Teresa Lamas de Rodríguez Alcalá, Concepción Leyes
de Chaves y Carlos Zubizarreta. Entre 1932 y 1935 el Paraguay sufre otra
guerra internacional (Guerra del Chaco, contra Bolivia) que tiene, no obstante,
consecuencias positivas en el plano literario al promover una toma de conciencia
de la realidad nacional y la incorporación de temas significativos
(la guerra, los problemas del agro y de los yerbales, la persecución
política, el exilio, etc.) en la narrativa posterior. Ejemplifican
dicha renovación temática: Cruces de quebracho (1934)
de Arnaldo Valdovinos, Ocho hombres (1934) de José Santiago
Villarejo, ambas inspiradas en la guerra del Chaco, y especialmente El
guajhú (1938) de Gabriel Casaccia, colección de cuentos
donde su autor da el golpe definitivo a la visión literaria idealizada
y romántica, totalmente falsa del campesino paraguayo. Sin embargo,
la narrativa paraguaya recién empieza a adquirir distinción
y atención internacional en la década del 50, con la aparición
en Buenos Aires de tres obras --La Babosa (novela, 1952) de Gabriel
Casaccia, Follaje en los ojos (novela, 1952) de José María
Rivarola Matto y El trueno entre las hojas (1953), la primera colección
de cuentos de Augusto Roa Bastos-- que rompen con las tendencias narcisistas
y mitificadoras prevalecientes y reincorporan a la ficción el realismo
crítico inaugurado por Rafael Barrett a principios de siglo pero
prácticamente ausente en la narrativa publicada hasta entonces dentro
del país. Las coordenadas histórico-políticas de los
últimos 50 años dificultan, y también explican, la
producción narrativa paraguaya. En ese lapso el país ha pasado
por una sangrienta guerra civil (Revolución de 1947) y ha soportado
una de las dictaduras más largas de la historia americana (la del
general Stroessner, 1955-1989). No debe sorprender entonces que las obras
actualmente más conocidas hayan sido concebidas y publicadas en
el exilio. En efecto, lejos de la represión y censura vigentes en
su país, los escritores exiliados pueden expresarse libremente y
desarrollar sin trabas una narrativa artísticamente elaborada, a
tono con el momento histórico presente y de contenido socio-político
significativo. De ahí que sea en las obras de esos expatriados --Rubén
Bareiro Saguier, Gabriel Casaccia, Rodrigo Díaz-Pérez, Augusto
Roa Bastos, Lincoln Silva, etc.-- donde se van a encontrar tanto el planteamiento
más directo como el reflejo más fiel de la problemática
nacional de las últimas cuatro décadas. Gabriel Casaccia,
iniciador de la narrativa paraguaya contemporánea, recupera de manera
crítica varias décadas de descomposición moral y corrupción
política en tres novelas: La Babosa, La llaga (1963) y Los
herederos (1975), y dedica Los exiliados (1966) a tocar el tema
del exilio político, prácticamente inexplorado en la narrativa
intrafronteras. Augusto Roa Bastos, Premio Cervantes 1989 y uno de los
escritores hispanoamericanos más destacados, examina el presente
y el pasado nacionales a lo largo de coordenadas histórico-políticas
en Hijo de hombre (1960) --novela del dolor paraguayo y uno de los
textos más importantes de la narrativa hispanoamericana contemporánea--
y en Yo el Supremo (1974), su segunda y más famosa novela,
narrada desde la ubicua perspectiva del doctor José Gaspar Rodríguez
de Francia, primer dictador paraguayo y una de las figuras más controversiales
de la historia nacional. La dictadura, tema de difícil incorporación
en la narrativa interna, está implícita o explícita
en el miedo que atormenta a tantos personajes de las obras del exilio.
Y se hace directa en su realidad de cárceles, torturas y persecuciones
en varios cuentos de Rubén Bareiro Saguier --incluidos en Ojo
por diente (1973) y en El séptimo pétalo del viento
(1984)-- y de Rodrigo Díaz-Pérez --contenidos en Entrevista
(1978) y en Hace tiempo... mañana (1989)-- como también
en las dos novelas de Lincoln Silva: Rebelión después
(1970) y General General (1975). Productos del destierro son también
dos obras inspiradas en la problemática nacional: El collar sobre
el río (cuentos) de Carlos Garcete y El invierno de Gunter
(novela) de Juan Manuel Marcos, ambas publicadas en 1987. En cuanto a la
producción narrativa interna posterior a 1960, es importante señalar
la gravitación negativa de la represión dictatorial y de
las censuras y autocensuras vigentes hasta fines de la década del
80 que explican, en gran parte, la escasez numérica de obras publicadas
dentro del país hasta el presente. Como bien lo indica Guido Rodríguez
Alcalá, dadas las circunstancias del contexto político-cultural
paraguayo, "lo sorprendente no es que no se produzca mucho en el país,
sino que se produzca" (en "La poesía y la novela en el
Paraguay en los últimos años [1960-1980]", ensayo incluido
en Viriato de Díaz-Pérez, Literatura del Paraguay,
Vol. II, 1980). Aunque la actividad narrativa durante este período
es relativamente escasa y las obras publicadas no han adquirido el reconocimiento
internacional de la producción del exilio, el corpus narrativo interno
cuenta, no obstante, con varios títulos y autores de mérito
que han recibido distinciones y premios nacionales importantes. Entre 1960
y principios de la década del 80 aparecen relatos que van de la
crónica costumbrista a la crítica explícita de diversos
aspectos del contexto histórico-político y socio-cultural
recreado en la ficción de esos años. Entre las obras representativas
de este período se deben destacar: Imágenes sin tierra
(1965) de José-Luis Appleyard; El laberinto (1972) de
Augusto Casola; Crónicas de una familia (1966) y Andresa
Escobar (1975) de Ana Iris Chaves de Ferreiro; La quema de Judas
(1965) de Mario Halley Mora; La mano en la tierra (1963) y El
espejo y el canasto (1981) de Josefina Plá; El pecho y la
espalda (1962) y La tierra ardía (1974) de Jorge Ritter;
Las musarañas (1973) y El contador de cuentos (1980)
de Jesús Ruiz Nestosa; Mancuello y la perdiz (1965) de Carlos
Villagra Marsal y Los grillos de la duda (1966) de Carlos Zubizarreta.
Durante los últimos años han aparecido algunas obras que
exploran en profundidad ciertas llagas dolorosas de la realidad paraguaya
y en donde la crítica a menudo se vuelve denuncia condenatoria del
régimen dictatorial represivo y asfixiante de más de tres
décadas. Entre éstas hay que mencionar en particular: Celda
12 (1991) de Moncho Azuaga; La Seca y otros cuentos (1986),
Los nudos del silencio (1988), Por el ojo de la cerradura
(cuentos, 1993) y Desde el encendido corazón del monte (cuentos
ecológicos, 1994) de Renée Ferrer; Diagonal de sangre
(1986) y La isla sin mar (1987) de Juan Bautista Rivarola Matto;
Sin testigos de Roberto Thompson Molinas y En busca del hueso
perdido: Tratado de paraguayología (1990) de Helio Vera, prácticamente
todas premiadas o finalistas en concursos nacionales de narrativa. Un aspecto
interesante y significativo de la producción narrativa (y también
poética) de los últimos 10-15 años es la aparición
de un alto porcentaje de voces femeninas en el panorama literario actual.
Más que en ningún período anterior, dichas voces se
manifiestan con gran fuerza y continuidad, y sus obras reflejan, temática
y estructuralmente, preocupaciones y estilos diversos, a tono con la narrativa
latinoamericana del último cuarto de siglo. Además de las
obras de Renée Ferrer, ya antes mencionadas, hay que incluir en
este grupo varias otras más, entre ellas: Golpe de luz (novela,
1983) de Neida Bonnet de Mendonça, La niña que perdí
en el circo (novela, 1987) y La vera historia de Purificación
(novela,1989) de Raquel Saguier, La oscuridad de afuera (cuentos,
1987) de Sara Karlik, y Tierra mansa y otros cuentos (1987) de Lucy
Mendonça de Spinci. La lista continúa y a los nombres ya
dados habría que agregar, además, los de Milia Gayoso, Chiquita
Barreto, Margot Ayala de Michelagnoli, como así también los
de tres cuentistas pertenecientes al Taller Cuento Breve (dirigido por
Hugo Rodríguez Alcalá) que se dieron a conocer en 1992 con
la publicación de sus respectivas obras: Luisa Moreno de Gabaglio
que dio a luz Ecos de monte y de arena, un libro de cuentos ecológicos,
Maybell Lebrón, autora de Memoria sin tiempo, y Dirma Pardo
de Carugati que publicó La víspera y el día,
obra cuyo estilo directo, según Hugo Rodríguez Alcalá,
"potencia el dramatismo de sus invenciones" (en el prólogo
al libro).
NOVECENTISMO (o "Generación del 900"). Movimiento
literario cuya denominación más generalizada --"generación
del 900"-- fue acuñada en 1950 por Juan Emiliano O'Leary, uno
de los "novecentistas" (i.e., integrante de la "generación
del 900"), y cuyos miembros nacieron inmediatamente después
de la Guerra de la Triple Alianza (1864-1870). Según el profesor
Raúl Amaral (en su libro El novecentismo paraguayo. Línea
biográfica y doctrinal de una generación, Buenos Aires,
Comentario, 1968), el Dr. Gualberto Cardús Huerta (1878-1949) dejó
indicado en 1922 el segmento temporal que comprendía a los nacidos
entre 1870 y 1880, "en la década de escombros" (como él
la denominó) y que tocaba a la primera posguerra. Indica el profesor
Amaral en su libro que este movimiento guarda ciertas analogías
con otros similares y de la misma época del continente y asimismo
con "el 80" argentino y "el 98" español. Pero
lo que debe interpretarse por "novecentismo paraguayo", agrega
el conocido escritor y crítico, es no sólo un agrupamiento
de jóvenes que en el momento de su actuación pública
--en la cultura o en las letras-- tenían entre 18 y 25 años
de edad, sino una posición de mayor validez. Debe recordarse que
ellos ocuparon la mayoría de los espacios entre los comienzos del
900 y las vísperas de la Guerra del Chaco, de la que participaron
en la defensa intelectual de la patria. Se presenta, además, esta
generación, asociada a la española del 98 --si bien no en
todos sus aspectos-- al incluir a precursores inmediatos, en el caso particular
de Valle Inclán y Unamuno (1864 y 1866) y en el paraguayo de López
Decoud y Domínguez (1867 y 1868), respectivamente. Luego vienen
los del 70 al 80 ya citados por Cardús Huerta, y hasta el 85, ciñéndose
a términos más amplios. Pero en la realidad ese "novecentismo"
domina por más de tres décadas la vida cultural paraguaya
(1899-1930) y de modo especial el proceso literario. Se advierten influencias
francesas, inglesas y en menor medida españolas. La prosa produce
el esteticismo de López Decoud y el tono poemático de Domínguez,
en tanto que la poesía continuará con la herencia posromántica
hasta las proximidades de 1910, sin desconocer el indudable impacto modernista.
Dos acontecimientos de importancia deben sumársele: la inauguración
de la crítica por medio del ensayo de Manuel Gondra: "En torno
a Rubén Darío" (1898-1899) y los inicios de la novelística
naturalista representados por el libro Ignacia de José Rodríguez
Alcalá (1905). Otro hecho de trascendencia lo constituyó
la quiebra generacional producida a partir del 17 de octubre de 1902 con
la polémica histórica entre Cecilio Báez y Juan E.
O'Leary.
Ñ
ÑE-ENGATU. Revista cultural dirigida y fundada en el exilio de Buenos Aires por Epifanio Méndez Vall en enero de 1983. Ñe-ëngatú se inició como medio de expresión e instrumento de información para la numerosa comunidad paraguaya radicada en la Argentina. Tiene ahora casi doce años de vida ininterrumpida y hasta la fecha se han publicado 81 números. Aunque empezó siendo una revista bimestral, desde 1992 salen diez números por año. De temática amplia --información política, económica y social, arte, historia, literatura, música, temas culturales diversos--, desde marzo de 1992 (No. 55), se incluyen en la revista las cuatro páginas del "Rincón Literario" --dirigido por la Dra. Teresa Méndez-Faith--, sección dedicada exclusivamente a hacer conocer la literatura paraguaya dentro y fuera del país. Ñe-ëngatú es una revista internacional con suscriptores y corresponsales en Paraguay, Argentina, Uruguay, Brasil, México y Estados Unidos.